sábado, 27 de agosto de 2011

Día 14: Zagreb

Buenas andarines,

Hoy no hay mucho que contaros, la verdad.

Nos ha pasado lo que en ningún viaje nos había pasado. Tras probar platos típicos, comidas desconocidas, carnes especiadas y bebidas extrañas, ha sido el pescado frito el que nos ha sentado como una patada en el estómago (a unas más que a otros).

Así que tras pasar la noche del loro, dando vueltas en la cama y con dolor de estómago, todos nuestros planes para hoy se han ido al traste.

Nos levantamos (yo a trancas y barrancas) y bajamos a desayunar, bueno, quien dice desayunar dice tomar una manzanilla, y, haciendo de tripas corazón, cogemos el tranvía para acabar de visitar la parte de Zagreb que dejamos pendiente ayer.

Una visita a la Catedral, que ayer estaba cerrada, y que es una verdadera preciosidad. Otra visita al mercado que cada día ponen en la parte antigua, pero entre los cientos, miles, millones de avispas que por allí pululaban, encima de la fruta, mezcladas con los frutos secos (aish, que horror) y el olor a la comida que allí habían (tengo nauseas por todo!), vamos, que la visita acabó rápido.

Nos dirigimos ahora a la parte de la ciudad más alta, y, cuando intentamos coger el cremallera que nos sube, atracción turística de la ciudad, resulta que no funciona y ahí vamos, escaleras arriba, bajo el sol y nuestras barrigas haciendo ruidos...

Una vez llegamos a lo más alto, vamos hacía el buque insignia del turismo zagrebí, la iglesia de San Marcos y, decidiendo no entrar en ningún museo, enfilamos por la Puerta de Piedra (muy curioso, con su capilla en medio) y de nuevo al tranvía que nos lleva de vuelta al hotel.

Qué malestar! Así que, con todo el dolor de mi corazón, pasamos la tarde en el hotel, entre dormitando y dando vueltas, acordándonos del pescado y dándonos náuseas e incrementando nuestra acidez de estómago con el odio que nos genera estar encerrados en las 4 paredes.

Sin comer y sin cenar, esperamos mañana encontrarnos mejor, puesto que abandonamos por fin Croacia para adentrarnos en Eslovenia.

Aish....

1 comentario:

PAPI dijo...

Ese es el riesgo que se corre al comer muchas comidas y en diferentes paises
Bueno pero seguro que para mañana estareis mejor
Animoooooooooooo